El 22% de los productores podrían ser considerados adoptantes de la tecnología de fertilización basada en la interpretación de análisis de suelos (Cenicafé, 2019, p. 100). Dado que esta tecnología es determinante en el manejo eficiente de la fertilización, especialmente en lo que respecta al nitrógeno, los técnicos de campo de forma reiterada piden actualizaciones o capacitaciones para la interpretación de los análisis de suelos.

Este producto busca que la habilidad de lectura e interpretación se practique y se consolide como una forma de contribuir a dar buenas recomendaciones. De este modo, los productores podrán obtener un beneficio mayor al acoplar los resultados del análisis con las recomendaciones de fertilización proporcionadas por sus técnicos acompañantes.

A pesar de que la lectura y los cálculos relacionados con la disponibilidad de los nutrientes en el suelo basados en los resultados de análisis de suelos forman parte de la formación profesional y tecnológica de los profesionales y asistentes técnicos, esta habilidad tiende a perderse por el olvido de los conceptos, fórmulas y pasos de cálculo, así como por la disponibilidad de softwares que entregan los resultados directamente desde los laboratorios que hacen el análisis.

¿Qué sucede si el técnico no comparte la recomendación de un laboratorio o quiere focalizar aún más la recomendación debido a cambios en la producción o nuevas fuentes de fertilización? Para algunos técnicos esta situación representa un desafío que pone su memoria al límite y, en ocasiones, les hace dudar de su capacidad para hacer cálculos precisos. En esos momentos pueden optar por tomarse «un tiempo fuera» o «llamar a un amigo» o simplemente adoptar una «recomendación general» que no tiene en cuenta el análisis. Esta última opción es una de las razones por las cuales los caficultores pueden cuestionar la utilidad de los análisis de suelos, ya que no encuentran recomendaciones específicas para las condiciones particulares de sus lotes o fincas.

Como una de las herramientas del Acuerdo Café, Bosque y Clima, este espacio de práctica es una invitación para que los técnicos, a través del autoestudio, refuercen su comprensión de los conceptos, pasos y cálculos, así como las prácticas necesarias para recuperar esta habilidad. De esta manera, se pretende aportar a mejorar la eficiencia de la fertilización, permitiendo determinar la dosis y fuente de fertilizantes que complementen y precisen las recomendaciones en cuanto al momento, lugar y forma de aplicación correctos.